Problemas entre madres e hijas

Aunque fueras el ojito derecho de tu padre, sin du­da, siempre has tenido más confianza con tu madre. Y es que, como apunta la psicóloga Deborah Tannen, la relación madre-hi­ja es "la madre de todas las relaciones". Si te fijas en la tuya o en la de alguna amiga, seguro que obser­vas que atraviesa todos los estados emocionales po­sibles, desde la comunica­ción más íntima hasta el enfrentamiento más amar­go. Sin embargo, y aunque tanto madre como hija busquen comprenderse y aceptarse mutuamente, los errores en su comuni­cación son muchos.

Motivos de los problemas entre madres e hijas

Atención excesiva:

En muchas ocasiones la ma­dre termina agobiando a la hija con sus interrogato­rios: "¿Qué has comido?, ¿Dónde vas con esas pintas?, ¡A ver si sientas la cabeza!". Por eso, la hija opta por rehuir las conversacio­nes largas, que hace años eran habituales entre ellas. Solución: En lugar de ha­blar mucho con ella, busca otras formas de acercarte; por ejemplo, ir de compras, al cine o al teatro juntas.

Falta de elogios:

Muchas madres nunca alaban los logros de sus hijas en su presencia, con lo que éstas creen que no lo están haciendo bien. La razón es que temen que los elogios disminuyan la motivación y ambición de las hijas, volviéndolas vanidosas. Solución: Comenta a tu madre tu descontento di­rectamente con frases co­mo "¿No crees que es fan­tástico que me hayan as­cendido?" u opta por el humor: "Ya sé que no he inventado la rueda, pero creo que me deberías feli­citar por haber aprobado el examen".

Ella lo sabe todo:

"Limpia esa mancha con leche. Las camisas no se planchan así... ".Aunque te dé consejos con la mejor de las intenciones, tú los percibes como críticas implícitas a tus acciones.

Solución: Trata de com­prender la profunda nece­sidad de tu madre de pro­tegerte, pero también ex­plícale que si te está corri­giendo todo el tiempo, te hace sentir insegura.

Desigualdad de sexos:

Si es cierto que quiere a tu hermano y a ti por igual, ¿por qué siempre te pide a ti que le acompañes o le hagas todo tipo de recados? Solución: Antes de con­siderar que su actitud es machista, piensa que quizá espera que tú, al ser mujer, la comprendas mejor.